Los más de 67 años de experiencia que tiene nuestro Instituto avalan su rol como ente fortalecer del desarrollo de profesionales chilenos en el área de la salud.
Año a año, el Instituto Nacional del Tórax acoge en sus programas de especialización y docencia a más de 200 futuros profesionales y técnicos de la salud quienes reciben toda la experiencia acumulada en 67 años de nuestro instituto.
El doctor Andrés Pinto es uno de ellos y fue en el Área Respiratoria de nuestro Instituto donde cursó su beca, experiencia que dejó una marca en su vida: “Llegué como becado residente en octubre del 2019; me tocó el estallido social y luego apareció la pandemia, y tuvimos que reorganizarnos y asumir nuevas funciones, dejar en pausa la actividad académica para sumarnos al trabajo en UCI de emergencia del hospital”, explica. Y continúa: “Fue bien complejo el primer año, pero muy interesante, ya que nos permitió conocer y relacionarnos con personas de otras unidades”.
En total son cinco las universidades chilenas que envían estudiantes de pregrado (internos) a nuestro instituto y 11 desde donde postulan alumnos de post grado (becados). Esto, debido al liderazgo y alto grado de especialización del INT en enfermedades cardiorrespiratorias.
María Luisa Zenteno, coordinadora de la Unidad Asistencial Docente, Investigación y Extensión del INT explica que esta es una experiencia enriquecedora tanto para los formados como para el hospital: “El programa que tenemos para recibir a becados es importante para nosotros, ya que los que llegan ayudan también mucho a nuestros pacientes gracias a sus conocimientos”, explica.
Consultado sobre las razones para elegir el programa del INT, el doctor Andrés Pinto señala que el nuestro es un centro que reúne tanto lo asistencial como el área de docente: “Tenemos una serie de reuniones clínicas, actividad de investigación y docencia que es continúa, día a día en casi todas las unidades; además, existe una cultura de docencia incorporada que se agradece y que potencia los distintos programas”.
Pinto aprovechó de destacar que “… pese a todos los peros que se nos han planteado con el COVID-19, se ha ido logrando la actividad normal bastante más rápido que en otros hospitales, tratando de volver a la prestaciones y atenciones de pacientes que, en muchas oportunidades, no son atendidos en otros lugares”.
Y finaliza: “El INT me entregó mucho conocimiento. Es el centro líder en medicina respiratoria en Chile y en América Latina. Acá es un buen lugar para formarse como estudiante de pre y postgrado, es bueno para trabajar y atenderse. Tengo muchas ganas de quedarme y estamos planificando mi vinculación posterior por medio de un contrato docente, me estoy organizando para marzo y pretendo volver”.