Ambas unidades tienen como objetivo aumentar la producción y la cobertura de procedimientos y cirugías cardiovasculares electivas y de urgencia, con el fin de dar una atención oportuna y de mayor calidad de vida a sus usuarios, disminuyendo riesgos vitales.
Hasta las remodeladas unidades médicas llegó la directora del Servicio de Salud Metropolitano Oriente, Dra. Andrea Solís, quien destacó positivamente los avances que se han realizado en ambas unidades: “Estoy muy contenta con todo lo que hemos visto hoy, ya que contamos con excelentes equipos, de última tecnología que hasta ahora no existían en Chile, con espacios amplios, muy acogedores tanto para pacientes como para funcionarios”, sostuvo la Dra. Solís.
Agrega que lo más importante, es que estas mejoras en salud pública “no sólo benefician a la red oriente, sino que al país, por tanto es un gran avance en materia de prestación de servicio de salud”.
En el sector de la Unidad de Cardiología Intervencional, la remodelación consideró la ampliación de los espacios físicos destinados para esos fines, mediante el traslado de Imagenología, Broncoscopía y Laboratorio desde el lado norte al sector sur del segundo piso. Asimismo incorporó salas de procedimientos, de recuperación, de informes e instalación de equipamiento y tecnología de punta.
Actualmente el equipo de esta áreas lo componen 29 personas, entre médicos, enfermeras, tecnólogos médicos, técnicos de nivel superior (TENS), administrativos y auxiliares. Ellos realizan un promedio de ocho procedimientos diarios de Hemodinamia y tres de electrofisiología.
Entre los procedimientos de Hemodinamia que se realizan se encuentran arteriografías, coronariografías, angioplastias y colocación de stent, valvuloplastías mitral y tricúspide (GES). Por su parte, en el pabellón de electrofisiología se realizan procedimientos tales como implante de marcapasos y desfibriladores y ablaciones, entre otros.
El director del Instituto, Pablo Gacitúa, explica que “este proyecto tiene una data de seis años desde que se presentó. En el 2014 comenzaron las intervenciones a la infraestructura y en forma paralela los trámites para importar los equipos desde Europa, que son de última generación”.
Serán los usuarios, finalmente, quienes se verán beneficiados con estas inversiones, ya que “estamos en un escenario donde las enfermedades cardiovasculares van en aumento en el país y donde tenemos una población que va envejeciendo, con mayores probabilidades de sufrir este tipo de enfermedades”, sentencia Gacitúa.