Son muchos los profesionales del área de la salud que están actuando de protagonistas en esta emergencia sanitaria. Uno de ellos es el fonoaudiólogo, cuya labor es fundamental durante todo el tiempo en el que un paciente se encuentra en la UCI.
En marzo del 2020, el Ministerio de Salud anunció el primer caso de Coronavirus COVID-19 en Chile, desde entonces se han registrado más de 220 mil personas infectadas y casi 4 mil fallecidos.
El trabajo de los profesionales de la salud ha ido en aumento y se hace cada vez más estresante. Porque no solo se necesitan médicos, enfermeros y kinesiólogos; los fonoaudiólogos también son necesarios, ya que realizan una gran labor que abarca diversos objetivos.
Una rehabilitación íntegra
Para saber más sobre el trabajo que estos profesionales realizan, conversamos con Gabriel Salgado Maldonado, Fonoaudiólogo del Instituto Nacional del Tórax (INT), quien nos explicó que, en este contexto de pandemia, se necesita una rehabilitación completa, lo que incluye a su especialidad: “Actualmente, cerca de 25 pacientes de nuestra UCI son candidatos a evaluación fonoaudiológica, porque ellos requieren una asistencia integral; este es un trabajo en equipo”.
Los tres aspectos en los que trabaja fonoaudiología son: alimentación, voz y comunicación.
En el primero de ellos, hay que tener en cuenta que los pacientes intubados en ventilación mecánica están con sondas nasoenterales, por lo tanto, no se alimentan de forma normal: “En esta etapa, el abordaje del fonoaudiólogo es desde la prevención, reactivando la musculatura. El tubo genera algunas lesiones, como el desuso de la vía de boca, faringe, laringe y esófago, lo que dificulta reiniciar la alimentación de manera rápida y oportuna, cuando el paciente comienza su recuperación. Entonces, aquí la labor es proteger la cavidad oral, hidratar la mucosa, prevenir las lesiones por presión e identificar cuál es la consistencia y volumen más seguro para poder alimentarse”, explica.
Sobre el trabajo con la voz, el profesional señala: “El tubo también produce lesiones a nivel de la garganta, pues pasa por la laringe, entremedio de las cuerdas vocales y, dependiendo de la posición y los movimientos, genera un determinado impacto en las cuerdas vocales, alterándolas y pudiendo ocasionar afonía o disfonía, dependiendo del tiempo de la intubación”.
En cuanto a la comunicación, Gabriel Salgado nos cuenta que están buscando implementar el uso de Tableros de Comunicación: “Hay que recordar que los pacientes que están en UCI intubados en vías de extubación y traqueostomizados, no pueden comunicarse y muchas veces es importante que lo hagan. Por eso, este tipo de apoyo sería muy útil”.
El profesional finalizó reiterando que cuando el paciente ya está en condiciones de comenzar su rehabilitación, una vez superada la enfermedad, es fundamental que tenga una evaluación fonoaudiológica: “Solo eso definirá cuáles serán las intervenciones que se le harán para salir adelante en su recuperación”.